CÁNCER: TRATAMIENTOS DE INMUNOTERAPIA PUEDEN DISMINUIR EN UN 70% SU REAPARICIÓN
En pacientes con tratamiento tradicional (quimio o radioterapia) potencia hasta un 40% su efectividad y en pacientes en etapas avanzadas, ya sin tratamiento, extiende la sobrevida en hasta un 325% dependiendo del tipo de cáncer.
Actualmente, según cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS) el cáncer fluctúa entre la primera a segunda causa de muerte en distintas regiones del mundo, sin embargo la tasa de supervivencia a esta enfermedad se ha duplicado en los últimos 40 años.
En Chile, las enfermedades oncológicas se posiciona ya en el primer lugar en cinco regiones, según cifras dadas por el Ministerio de Salud, el 25% del total de defunciones en el país donde el 65% de las muertes ocurre en personas mayores de 65 años. La tasa de incidencia anual de cáncer en Chile fue de 216,9 por 100 mil habitantes y se espera que para el 2020 el cáncer se posicione en el primer lugar de la lista de causas de muerte en el país.
Existen más de 100 tipos de cáncer y por largos años sus métodos más comunes de tratamiento han sido la cirugía, quimio y radioterapia. Sin embargo, en el último tiempo han surgido nuevos tratamientos para combatir las enfermedades oncológicas, como es el caso de la inmunoterapia.
Desde Concepción, y con el apoyo de CORFO, la empresa chilena BioGénica logró desarrollar biotecnología para tratamientos de inmunoterapia para enfermedades oncológicas y exportarla a varios países del continente, e incluso de Europa. Este tipo de tratamiento estimula las defensas naturales del organismo con el fin de combatir la enfermedad, utilizando sustancias producidas por el cuerpo o desarrolladas en laboratorio para mejorar o restaurar la función del sistema inmunitario.
De este modo, la inmunoterapia puede detener o retrasar el crecimiento de células cancerosas; impedir que estas se ramifiquen a otras partes del cuerpo, y ayudar al sistema inmunitario para que funcione mejor.
El Centro Clínico ReCell, uno de los primeros centros en Chile que logró desarrollar tratamientos personalizados contra el cáncer, lleva 5 años desarrollando protocolos para pacientes con enfermedades oncológicas a través de tratamientos de inmunoterapia exclusivamente enfocados en células dendríticas, fortaleciendo el sistema inmunológico del paciente; activando linfocitos contra sus células tumorales específicas, sin reacciones adversas, complicaciones o deterioro de su condición clínica.
“La inmunoterapia de células dendríticas es considerada el primer tratamiento para manejo de enfermedad tumoral residual luego de un exitoso tratamiento de oncología convencional (radio-quimio-cirugía), y también para pacientes sin más opción convencional”, explica el doctor Ramón Gutiérrez, médico, patólogo, oncólogo molecular, CEO de Biogénica internacional.
Además, “posee efectos terapéuticos y mecanismos de acción inmunológicos absolutamente complementarios a los programas de cuidado paliativo para un paciente y es considerada como el ‘punto de inicio’ al ámbito de la inmunoterapia en tumores sólidos, con una simple aplicación ambulatoria, intradérmica (piel)”, señala el doctor José Carlos Castillo, director de ReCell.
¿CÓMO FUNCIONA?
La inmunoterapia antitumoral se desarrolla como medicina personalizada, con base científica, inclusive con un premio Nobel de Medicina en 2011 de los doctores Ralph Steinman y Zanvil Cohn.
En pacientes con buena respuesta a los tratamientos convencionales se realiza a partir de sus propias células sanguíneas, programadas contra su mismo tumor que luego son aplicadas como células dendríticas de forma segura y ambulatoria en la piel del paciente, permitiendo que el propio cuerpo las detecte y con ellas elimine células tumorales.
“Con este propósito, las células dendríticas aplicadas al paciente estimulan linfocitos de los ganglios linfáticos, con capacidad de atacar células cancerosas, potenciando hasta en un 40% los efectos de una quimio o radioterapia reciente y; disminuyendo hasta en un 70% la reaparición del cáncer. Esta capacidad defensiva persiste por años después de aplicada al paciente, en la llamada ‘memoria inmunológica’”, comenta el doctor Roberto Tubiñez, agregando que “los avanzados protocolos de segunda y tercera generación alcanzan cada vez mayor efectividad y mejor tolerancia en los pacientes y han optimizado numerosos aspectos de los protocolos iniciales de células dendríticas, por lo cual es muy importante la información profesional al paciente y evitar protocolos inefectivos, que algunos centros ofrecen preparar incluso en 24 horas”.
En tanto, en pacientes que no obtuvieron buena respuesta a la oncología básica, donde el cáncer sigue presente (lo que es frecuente en etapas avanzadas), el tratamiento de inmunoterapia de Recell se realiza con el propósito de potenciar las defensas del paciente; reducir hasta en un 80% la intensidad de las complicaciones clínicas derivadas del tumor; mejorar la calidad de vida y extender su sobrevida en hasta un 325%, según el tipo de cáncer del paciente, teniendo presente que por ser una terapia biológica, el mismo protocolo puede evolucionar distinto en cada paciente, distinguiéndose factores dependientes del tipo de cáncer, la funcionalidad de sus células dendríticas y el hospedaje inmunológico que desarrolla el paciente, aclara el doctor Gutiérrez.